03 septiembre 2015

LOS DIRECTORIOS DEL MINISTRO OTTONE



Al iniciar su intervención en el foro de detentores de Premios Nacionales con que se inauguró la reciente Convención Nacional de la Cultura -la número doce- Agustín Squella destacó que el Ministro Ernesto Ottone, en lugar de tomarse él la palabra, la entregara, para la relevante ocasión, a cuatro intelectuales chilenos. Deseó que fuese una señal. Y así ocurre al menos en lo que a la presencia del Ministro en los Directorios de los centros culturales que reciben aportes fiscales. Desde la designación de Ramón López en la Presidencia del GAM; de Alejandro Rodríguez en la del Parque Cultural de Valparaíso, y de María Inés Silva en el Directorio del Teatro Municipal de Santiago.


Con ellos, comenzó un proceso mediante el cuál el Consejo Nacional de la Cultura ha nombrado sus representantes en grandes centros culturales. Esta estrategia del Ministro de Cultura, busca cambiar la figura vigente donde el propio personero participaba como presidente de los respectivos directorios, con todas las limitaciones de tiempo que ello implicaba y eventuales dificultades en el traspaso de recursos pues son fondos que llegan desde el Consejo Nacional de la Cultura.


Corporaciones y fundaciones de derecho privado sin fines de lucro son gobernadas por directorios ad honórem elegidos por sus asambleas de socios y en ellos se garantiza la presencia de uno o más representantes del Estado, normalmente el principal es el Ministro Presidente del Consejo Nacional de la Cultura. En otros casos, como el Centro Cultural Estación Mapocho, es el Ministro de Educación. Estas corporaciones reciben, en comodato a plazo fijo, espacios de propiedad fiscal desde el Ministerio de Bienes Nacionales.

La creciente diversidad y cantidad de estos espacios culturales, desde 2000 a la fecha, hacen que sea muy complejo para el Ministro  participar en todos los directorios, que se reúnen con periodicidad trimestral y en algunos casos- hasta mensual.

"Hago hincapié en que estas personas no son representantes míos, o emisarios del Consejo, señala Ottone, esta decisión tiene relación con que como Ministro de Cultura tengo un espacio en cada uno de estos directorios, y esa es una tarea que me parece más sensata abordar desde una mirada más rica y diversa del medio artístico y cultural". El perfil de los elegidos ha sido "marcado por la experiencia profesional y su desafío va de la mano con el rol y espíritu público de su ejercicio,  y que tiene que ver con ser representantes del Estado en la gestión de estos espacios. Cada uno está donde está porque cuenta con las capacidades técnicas y profesionales para ejercer con autonomía la toma de decisiones necesarias en cada caso. Justamente porque nosotros como Consejo Nacional de la Cultura  no queremos influir en esa toma de decisiones, es que hemos pensado en estas personas".

En el Centro Cultural Palacio de La Moneda, Ottone designó en la presidencia a la geógrafa de la UC María Eliana Arnz, Directora Ejecutiva de Fundación Casa de la Paz, ex Coordinadora del Programa Conjunto de Pueblos Indígenas de la Oficina del PNUD en Chile, que fuera Subsecretaria General de Gobierno y Subdirectora del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, durante el período de Paulina Urrutia. Este centro cultural, por ser administrado por una Fundación, creada por el Ministro José Weinstein, es la única institución que permite a Ottone designar tres directores. A Arnz se suman el abogado Gonzalo Sánchez y el arquitecto Federico Sánchez, conductor de TV. 

Matías Rivas, director de ediciones UDP, llega a la Corporación Cultural Matucana 100; Loreto Bravo, secretaria ejecutiva de Acción AG y ex funcionaria del Consejo Nacional de la Cultura, a Balmaceda Arte Joven, que además tiene en su directorio a representantes de la Alcaldía de Santiago y del Ministerio de Educación.

La ex integrante del Directorio Nacional del Consejo Nacional de la Cultura y ex agregada cultural de Chile en México, Cecilia García-Huidobro, presidirá la Fundación Museo Violeta Parra, pronto a inaugurarse.

La ex Primera Dama, integrante también del Directorio del Teatro Municipal -por designación alcaldicia- Luisa Durán, representará a Ottone en la Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles, que contribuyó a fundar, y la arquitecta Beatriz Navarrete se integra a Artesanías de Chile, entidad de la que fue Directora Ejecutiva.

Este destacado elenco, junto con dar bríos desde la sociedad civil a la gestión cultural de espacios públicos con administración privada sin fines de lucro, marca una nueva etapa en la relación del Consejo Nacional de la Cultura con los centros que reciben aportes financieros del estado, mediante una glosa presupuestaria.   

Es posible apreciar que los nuevos directores tienen amplio conocimiento de las instituciones que pasaran a integrar y una vasta experiencia en el creciente sector sin fines de lucro que contribuye enormemente al desarrollo cultural chileno.

Y también que el Ministro, entrega la palabra. Tal como aparece en los primeros lineamientos de la indicación sustitutiva del proyecto de ley de Ministerio de Culturas, en las que el Directorio Nacional no sólo se conserva sino que se amplía.

2 comentarios:

  1. Buenísima reflexión, Arturo Navarro. Inteligente y sensata la estrategia del Ministro Ottone, trazando líneas de trabajo por donde la cultura pueda transitar de modo más eficiente, removiendo estructuras de gestión arcaicas. Para cuándo un remezón a la estructura museística?

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  2. Gracias, Inés, un saludo afectuoso.
    Respecto de tu pregunta, pienso que, por lo que conozco de la indicación sustitutiva del proyecto de Ministerio, allí se aborda una importante modificación de la gestión de los museos públicos. Será materia de un próximo artículo....

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